En un camino de búsquedas y encuentros continuos, lograr aprender a cada instante es lo más enriquecedor que puede haber. Aquí me encuentro, buscando, aprendiendo, compartiendo....
Estamos tan acostumbrados a lo novedoso e innovador que no miramos al pasado y la inteligencia natural donde se esconden muchas de las soluciones a los problemas de la actualidad.
Lima atraviesa una problemática sequía que amenaza con endurecer aún más las restricciones al consumo de agua. Los técnicos de la capital de Perú han encontrado una solución inesperada para mantener el suministro de agua: recuperar las amunas, una técnica de irrigación anterior incluso a los Incas.
El problema de Lima es el mismo que el de muchas otras ciudades ubicadas en zonas muy secas. En este caso, y a pesar de una elevada humedad ambiental, la ciudad tiene un microclima con muy pocas precipitaciones al año. La época seca suele durar en torno a siete meses. Tras un año especialmente poco generoso en lluvias, los habitantes de la capital peruana enfrentan restricciones para alargar al máximo las reservas existentes.
Una de las soluciones que se barajaba era construir una nueva planta desalinizadora para extraer agua potable del mar, pero se trata de un proyecto caro y cuya construcción llevaría demasiado tiempo. En su lugar, técnicos de la compañía de agua Sedapal han decidido invertir en conservar los antiguos Amunas construidos por la cultura Wari, que desarrolló todo un imperio anterior a los Incas entre el 550 y el 900 después de Cristo.
Hoy puede paecernos simple, pero los Amunas eran una tecnología muy avanzda para la época. Se trata de canales que forman parte de un complejo sistema de irrigación que recorría lugares específicos de la cordillera de los Andes recogiendo agua de lluvia. En lugar de almacenar este agua en depósitos, los Wari hicieron confluir estos canales hacia las zonas donde están los acuíferos subterráneos que dan origen a los ríos de esta parte del mundo. El agua se vertía en esas zonas y se filtraba en el suelo, alimentando el acuífero de manera natural e incrementando la reserva del río durante la estación seca. Este vídeo explica un poco más esta antigua ciencia.
De momento, los investigadores están estudiando los amunas para saber exactamente donde va a parar el agua que vierten. La idea es invertir 23 millones de dólares en recuperar cincuenta de estas antiguas canalizaciones de casi 1.500 años.
Según las estimaciones, recuperar los amunas permitirá incrementar las reservas de agua de Lima en un 60%. Un reciente estudio publicado en el Quinto Foro Mundial de los Bosques, celebrado en octubre del año pasado en Pekín, también sugiere que la medida podría ayudar a evitar las ocasionales inundaciones que se producen durante la época de lluvias. Los Wari parecían saber muy bien lo que se hacían con estos canales aparentemente primitivos, pero muy ingeniosos.
Claro!!!, las cosas no llegan a uno por casualidad, todo es parte de un plan, y cuando más lo necesitamos, en cierto punto lo buscamos, y ahí está!!!, como estuvo siempre, pero se hace real para nosotros.
Necesito reinverntarme, creer en mí, empezar de nuevo sin empezar, solo saber que cada segundo es nuevo, que cada instante estamos de estreno, pero ser más conscientes de ello nos hace poder sentir la emoción de estrenar algo.
Gracias, gracias por esta vida y esta inmensa posibilidad de disfrutarla. Feliz!.
Un gran tema... ¿que hacemos con nuestros desechos cloacales?, claro que lo que no sirve, se desecha, pero ¿a donde?
Donde no existen sistemas de redes de cloacas, hay que buscar soluciones para ubicar y mejor aún tratar estos desechos inevitables. Existen varios sistemas que se pueden implementar, biodigestores, plantas de tratamientos, o los clásicos pozos negros, algunos mejores, otros no tanto, algunos más económicos otros no tanto... Todo posible de adaptarse y también de ir implementándolos de a poco.
Para una vivienda unifamiliar, describo aquí características de estos tres sistemas:
POZO CIEGO
Un pozo ciego debe poseer una cubierta hermética que impida la expulsión de gases de la putrefacción. El uso de estos pozos solo se permite en localidades rurales o urbano marginales que no cuentan con la red de alcantarillado o que están alejadas de la localidad y resulta muy costosa su conexión. En estos pozos se realiza la separación y transformación físico - química de la materia sólida contenida en esas aguas. Las aguas residuales se depositan por decantación en el reservorio donde la parte sólida libera la parte líquida. Luego, por efecto de determinadas bacterias anaerobias las aguas negras se descomponen quedando menor cantidad de materia orgánica, ya que la fosa elimina cerca del 40% de la demanda biológica de oxígeno, y así la misma puede devolverse a la naturaleza con menor perjuicio para ella. El quitar los sólidos del agua residual protege el sistema de filtración para evitar la obstrucción y falla prematura. A la vez que se quita materia sólida, la fosa séptica también permite la digestión de una porción de sólidos y almacena la porción no digerida. Por la posible presencia de organismos patógenos, la parte sólida debe ser retirada después de un tiempo, a través de un canal limpia-fosas y transportada a un vertedero en las zonas urbanas o enterrada en zonas rurales.
El cieno (materia sólida) continúa acumulándose en el fondo del pozo mientras se usa el sistema, sin ningún tipo de intervención. Los pozos diseñados debidamente cuentan con espacio seguro para la acumulación de al menos, tres años de cieno. Cuando el nivel del cieno sobrepasa ese punto, el proceso ya no es eficaz. Si sube el nivel del cieno, más materia sólida entra en el área de filtración. Si el cieno se acumula durante demasiado tiempo, no ocurre la separación de materia sólida del agua y las aguas negras entran directamente en el área de filtración. Para prevenir ésto, el tanque debe vaciarse mediante la aspiración de la bomba de un camión especial.
BIODIGESTOR
Un digestor de desechos orgánicos o biodigestor es, en su forma más simple, un contenedor cerrado, hermético e impermeable (llamado reactor), dentro del cual se deposita el material orgánico a fermentar (excrementos de animales y humanos, desechos vegetales-no se incluyen cítricos ya que acidifican-, etc) en determinada dilución de agua para que a través de la fermentación anaerobia se produzca gas metano y fertilizantes orgánicos ricos en nitrógeno, fósforo y potasio, y además, se disminuya el potencial contaminante de los excrementos. Este sistema también puede incluir una cámara de carga y nivelación del agua residual antes del reactor, un dispositivo para captar y almacenar el biogás y cámaras de hidrogenación y pos tratamiento (filtro y piedras, de algas, secado, entre otros) a la salida del reactor. El fenómeno de indigestible ocurre porque existe un grupo de microorganismos bacterianos anaeróbicos presentes en el material fecal que, al actuar sobre los desechos orgánicos de origen vegetal y animal, producen una mezcla de gases con alto contenido de metano (CH4) llamada biogás, que es utilizado como combustible. Como resultado de este proceso se generan residuos con un alto grado de concentración de nutrientes y materia orgánica (ideales como fertilizantes) que pueden ser aplicados frescos, pues el tratamiento anaerobio elimina los malos olores y la proliferación de moscas. Una de las características más importantes de la biodigestión es que disminuye el potencial contaminante de los excrementos de origen animal y humano, disminuyendo la Demanda Química de Oxígeno DQO y la Demanda Biológica de Oxígeno DBO hasta en un 90% (dependiendo de las condiciones de diseño y operación). Se deben controlar ciertas condiciones, como son: el pH, la presión y temperatura a fin de que se pueda obtener un óptimo rendimiento.
El biodigestor es un sistema sencillo de implementar con materiales económicos y se está introduciendo en comunidades rurales aisladas y de países subdesarrollados para obtener el doble beneficio de conseguir solventar la problemática energética-ambiental, así como realizar un adecuado manejo de los residuos tanto humanos como animales.
PLANTA CLOACAL
-TRATAMIENTO BIOLÓGICO: lodos activados. El líquido ingresa a la cámara anaeróbica donde comienza la degradación de la materia orgánica contenida en el efluente; luego pasa a la cámara de aireación donde se produce la mayor degradación de la materia orgánica contenida en el mismo y la eliminación de los olores, mediante el proceso de lodos activados. En este proceso se genera una biomasa (conjunto de microorganismos) que utiliza la materia orgánica contenida en el líquido y el oxígeno suministrado por los sopladores para su crecimiento y reproducción. Dentro de la cámara de aireación y a la salida de la misma, tendremos una mezcla del líquido en tratamiento y la biomasa, que la llamaremos Licor Mezcla. El licor Mezcla que abandona el recinto de aireación ingresara en el sedimentador secundario, en donde la biomasa decantará hacia el fondo del mismo. De aquí obtendremos dos corrientes: Liquido clarificado: el mismo es el líquido ya tratado y separado de la biomasa que abandonará, por rebalse, el sedimentador secundario por el vertedero ubicado en la parte superior de esta unidad, siguiendo así su curso. Barros: formados por la biomasa sedimentada en el fondo serán continuamente recirculada a la cámara de aireación mediante un air lift. Con el paso de los años (en la práctica cada 5 o 7 años aproximadamente) puede llegar a acumularse un exceso de barros que debe ser retirado, el mismo puede ser extraído manualmente y reutilizado como abono (previa desinfección) o se puede retirar con camión atmosférico. -DESINFECCIÓN: el líquido clarificado ingresará a una cámara de cloración alimentada por pastillas de cloro para la desinfección del efluente previo al vertido o reutilización y así asegurar la ausencia de bacterias y la calidad del vuelco.
El sistema más completo, efectivo y ecológico sería una planta de tratamiento a medida, con un campo de infiltración que aproveche las aguas resultantes. Obviamente que lo mejor siempre es un poco más costoso.
Para el proyecto de mi vivienda El sereno, resolvimos implementar una conjunción de sistemas que disminuya los costos y nos garantice la no contaminación de las napas freáticas.
Implementaremos una cámara séptica, pozo ciego y campo de infilttración, posteriormente, agregaremos la planta de tratamientos si observamos que el pozo ya está saturado o no cumple sus funciones como debería.
Continuando con el desarrollo de la vivienda, Casa Valle el Sereno, éstas son las las características que busco aplicar:
Diseño bioclimático:
Se tendrá en cuenta
la implantación de la construcción en referencia a la incidencia del sol y los
vientos, aprovechando las ventilaciones cruzadas. De esta manera, se optimizará
en ingreso de luz solar en invierno y la disminución del ingreso de calor en
verano para disminuir el uso de artefactos de calefacción o acondicionadores,
reduciendo considerablemente su correspondiente consumo.
La vivienda se
cierra al sur, para evitar el ingreso de los vientos fríos, al este y noroeste
sus ventanas son amplias y al sudoeste, se dispuso una importante galería que
ayuda a mantener las temperaturas internas en verano y genera un microclima
agradable, además de permitir disfrutar el exterior durante gran parte del año.
Estructura eficiente
La estructura
general de la vivienda estará compuesta por un sistema de perfiles de acero
galvanizado cubiertos por paneles de placa de yeso en su interior y paneles cementicios
en el exterior. Internamente una unidad de celulosa aislará en un 100% la
estructura lo mismo en los techos, aislando la casa en todo su recorrido
(techo, muros y suelo) superando ampliamente los coeficientes de transmitancia
térmica generalmente aplicados en las construcciones tradicionales.
Utilización de energías limpias y renovables:
La casa se
abastecerá completamente con energía eléctrica, la falta de redes de gas y su
consecuente decisión de no implementar combustible para ningún uso ayuda a
reducir considerablemente las emisiones de CO2 que producen los mismos.
Climatización:
De deberá tener en cuenta no solo la eficiencia y la correspondiente
disminución de los costos derivados del consumo posterior, sino también en este
caso el presupuesto inicial acotado, el cual, a pesar de la eficiencia de los
sistemas a veces no se puede invertir inicialmente en ellos. Tal es el caso de losas radiantes o kits de calefacción solar, los cuales los costos se hacen demasiado elevados para proyectarlos inicialmente.
Iluminación LED e incandecente:
Bajo consumo en
electricidad con lámparas LED e incandecentes.
Salamandra a leña
Con uso de leñetas ecológicas, muy eficiente en la emisión de calor. Se realizará un sistema de
recuperación de calor por convección que permitirá enviar de 2 a 5 salidas
hacia otros ambientes, permitiendo calefaccionar mayores superficies y hacer un
mejor aprovechamiento de la energía generada.
Filtrado de agua de pozo:
Para evitar el
consumo de agua embotellada, y sabiendo que el agua puede tener restos de
contaminación por las napas, se utilizará un sistema de filtrado de agua por
ósmosis inversa y control de sarro.
Uso racional del agua:
Todas las griferías
son eficientes y los inodoros de doble descarga.
Recolección de agua de lluvia:
Se colectan agua de
lluvias de los techos. Será almacenada en tanques cisternas ubicados en el
jardín que luego se utilizará para inodoros, lavarropas, riego y limplieza.
Recupero y reutilización de aguas grises:
El agua de los
lavatorios, la ducha y el lavarropas es recuperada y filtrada para luego ser
reutilizada para otros usos que no
requieren agua potable.
Tratamiento de aguas negras:
Se utilizará un
biodigestor o planta de tratamiento de efluentes para recuperar el agua de los inodoros, bidet y pileta de cocina. El agua procesada
se reutiliza para riego del jardín.
Separación de los residuos doméstcos:
La cocina tendrá
compartimentos diferenciados para los residuos, permitiendo dividir y
reutilizar los desechos orgánicos de los inorgánicos. Disminuyendo notablemente
las cantidades de desechos y aprovechando para derivar los que sirvan para
reciclar (botellas, PET, cartón, papel, vidrio, etc.)
Generadores de Compost.
Utilizando los
desechos orgánicos se generará compost y fertilizante orgánico para las
huertas.
Huertas verticales:
Proveerán a la
familia de especias y ciertas verduras para su consumo.
Durante la construcción:
Desarrollo sustentable del proyecto:
Selección de profesionales y
proveedores en función a calidad y sustentabilidad de sus productos, procesos
industriales y proximidad de plantas o centros de distribución. Selección de
materiales priorizando aquellos reciclados o recuperados.
Desarrollo sustentable de la obra:
Mínimo desperdicio
y/o desechos de materiales. Reutilización de residuos. Utilización de
materiales reciclados para obrador, composteras, etc.
Formalmente doy inicio a mi primera concreción de vivienda "lo más posible sustentable". Estoy en etapa de proyecto y seguramente se inicie la obra en unos días. Será mi propia vivienda familiar, para la cual hemos adquirido un crédito que nos permitirá afrontar los gastos generales. Por lo tanto, la disponibilidad de dinero deberá ser un tanto controlada. Intentaré hacer una vivienda acogedora, cómoda, hermosa, eficiente y ecológica!!!!. Algunas herramientas se irán adicionando seguramente con el tiempo pero hay muchas decisiones que se deben tener en cuenta en el momento de proyectar para no caer luego en sobre-gastos o imposibilidades de aplicación. ¿Por que "lo más posible sustentable"?. Sustentable es algo que se puede sostener a lo largo del tiempo sin agotar sus recursos o perjudicar el medio ambiente. En este sentido aplicaré las técnicas que tenga más a mano y que mis recursos lo permitan, sin dejar de lado el confort con el que pretendemos vivir. Por lo que muchas veces, por falta de recursos económico tendré que posponer algunas desiciones pero a largo plazo se aplicarán. Algunos defensores de la ecología afirmarán que no es 100% sustentable, por lo que no pretendo caer en discusiones sobre conceptos y aplicaciones. Recién cuando la casa esté terminada y se pueda medir el resultado final, me permitiré discutir el grado de sustentabilidad. El objetivo será un poco experimentar con las posibilidades que contamos, muchas veces muy simples y otras no tanto, para aplicar en nuestro entorno y forma de vida. A medida que avance compartiré en este blog, tanto la búsqueda de información como el avance de la obra. Claro que acepto sugerencias!!!!
Algunos elementos
claves a tener en cuenta para el desarrollo de construcciones sustentables son:
·Gestión del ciclo de vida, tanto de la edificación con el entorno y el
desarrollo urbano.
·Uso eficiente y racional de la energía.
·Conservación, ahorro y reutilización del agua.
·Utilización de recursos reciclables y renovables en la construcción, en la
operación y prevención de residuos y emisiones.
·Selección de insumos y materiales derivados de procesos de extracción o
producción limpia.
·Mayor eficiencia en las técnicas de construcción.
·Creación de un ambiente saludable y no tóxico en los edificios.
·Cambios en hábitos de personas y comunidades en el uso de las edificaciones
para reducir su impacto en la fase operacional e incrementar su vida útil.
Ya estoy en carrera, por lo que de a poco iré compartiendo y registrando mi experiencia.
Las casas construidas con botellas, ya sean plásticas o de vidrio se están haciendo cada vez más populares. Resultan una alternativa muy económica, ingeniosa y una solución para la ya casi común falta de vivienda digna en todo el mundo.
Han surgido diferentes sistemas a partir de estos materiales reutilizándolos y adaptándolos.
Los beneficios son muy claros y parecerían un buen reemplazo a otros materiales industrializados, aprobados por las normas ISO, IRAM, etc. y códigos de edificación y demás. Por lo que ahora descubrimos que muchos de todo eso se puede reemplazar por lo que inconcientemente casi todos desechamos a diario en nuestras bolsas de residuos.
Pero lo más importante creo que es que esta forma de construir beneficia notablemente la auto construcción, el voluntariado, el surgimiento de Ongs que apuntan a ayudar a personas carenciadas por su importante déficit de vivienda.
La construcción en base a botellas se puede poner en paralelo al uso del ladrillo, es básicamente el mismo sistema pero cambiando el material. Las botellas funcionan como “eco-ladrillos” y pueden ser de plástico pet (Polietileno Tereftalato) o de vidrio; éstas últimas pueden generar luminosidades y efectos de colores diferentes en muros no estructurales.
El proceso es sencillo: recolectar las botellas, llenarlas con tierra, arena, escombros finos o bolsas de plástico, sellarlas, amarrarlas con cuerda o nylon para conformar una red y luego incorporarlas al muro a través de una mezcla que -para lograr mayor firmeza y duración- puede ser en base a tierra, arcilla, aserrín y cemento. En muros estructurales es muy importante el relleno de las botellas, para asegurar su resistencia a largo plazo, y hacerles una pequeña perforación para permitir la respiración del material de relleno.
Las botellas se tienen que disponer perpendiculares al muro y alternadas entre ellas, con sus tapas y fondos en diferentes direcciones. Por lo tanto, es recomendable que en un mismo muro se use el mismo tipo de botella.
Considero que la utilización de residuos o desperdicios es una excelente alternativa pero no una solución ecológica, lo ideal es dejar de producir los residuos, pero mientras tanto, el aprovecharlos es esencial y los ingenieros (no porque tengan un certificado universitario sino por su ingenio) que generan estos proyectos buen éxito se merecen...
Inspiración y ejemplo. Que bueno que cosas así sucedan, sirven no se si para que intentemos imitarlos, porque creo que "son cosas que pasan", pero si para tomar conciencia de "las cosas que pasan". Para darnos cuenta de que no está todo inventado, que siempre hay más por hacer, por mover, por intervenir, cambiar o ayudar.
Aquí les cuento la historia...
William Kamkwamba vivía con sus padres en Masitala, una pequeña aldea a 2 horas en camioneta de la capital de Malawi con 50 chozas de adobe, sin agua corriente ni luz, y todas sumidas en la mas absoluta pobreza.Hasta que el chico de 14 años, que había abandonado la escuela por falta de pago, decidió hacer de su ingenio su porvenir y erigió con sus propias manos y basura reciclada un pequeño molino de viento que cambiaría su aldea para siempre.Esta es la historia de un fascinante proyecto y sus mediáticas consecuencias.
William nació el 5 de agosto de 1987. En uno de los países más pobres y densos de África: Malawi.
Con 13 millones de habitantes, la mayoría rozando la extrema pobreza, tiene una tasa del 14% de infección por VIH y una esperanza de vida cercana a los 43 años.
El problema fundamental del país es la necesidad de importar, casi en su totalidad, todos los bienes y energías de consumo, dispensando al país una deuda externa progresiva que le impide crecer y desarrollarse para salir de su condición de extrema pobreza. En 2001 la hambruna se agudizó en todo el país.
Compartía choza con 6 hermanas y sus progenitores.Ayudando en las tareas de cultivo de tabaco y en cualquier chapuza que generase ingresos a la familia.
Sin luz ni agua corriente, las prohibitivas candelas de parafina iluminaban su hogar al caer el sol día tras día; cuando los recursos eran suficientes para abastecerse de ellas en el economato que estaba a 8 kilómetros de distancia.
A pesar de no estar escolarizado, William no carecía de ingenio y ganas de aprender sometido, desde que tenía uso de razón, por el instinto de supervivencia.
Abandonó la escuela pero devoraba las revistas y los viejos y carcomidos libros que alguna ONG depositaba en en club social de la aldea.
A sus manos llegó un ejemplar de una publicación educativa de ciencia que explicaba como convertir el viento en electricidad. Manos a la obra. Era septiembre de 2002.
Con una vieja bicicleta, el ventilador de un tractor abandonado, gomas, madera de eucalyptus y los desechos de agricultores vecinos comenzó a construir el primer aero-generador particular de todo el país.
“Al principio, nos reímos mucho de él”, dice Agnes Kamkwamba, su madre. “Pensábamos que estaba haciendo algo completamente inútil.”
Midiendo pieza a pieza,
Buscando materiales lo más resistentes y ligeros posibles, William consiguió encauzar el viento a través de su molino para llevar la luz artificial a sus asombrados progenitores.
Sin saberlo, el bueno de William estaba levantando, no sólo un molino de viento que ayudaría a abastecer de energía a su aldea, sino la bases para la mejora de la deteriorada conciencia auto-suministradora de sus deprimidos compatriotas.
En apenas unas semanas el generador del molino estaba funcionando.
Lo que más costó a William fue reunir los 16 dólares que le pedían por una dinamo en condiciones.
Un hilo de cobre trenzado de retales dispares, conectaba el generador con una vieja batería de tractor.
Esta batería servía a 4 bombillas, una radio e incluso al cargador del único móvil de la aldea.
Comenzó con una altura de 5 metros y conforme iba mejorando su estructura y su potencia logró elevarlo hasta los 12. Fue el primero de una serie de molinos que William construyó por toda el pueblo.
Un proyecto mediático
Hasta aquí una historia inspiradora y alentadora. Ahora viene el “Ripple effect” (efecto en cadena) , las consecuencias inesperadas de un azaroso y siempre compasivo destino.
El primer molino era un reclamo. Una construcción que superaba en altura a cualquier choza o edificación de la zona.
Un hito visible en la llanura africana desde cientos de metros, que atraía a curiosos y cooperantes y que convirtió a William en el ‘ingeniero’ más joven y admirado de la comarca.
La aldea estaba muy cerca de la carretera que llevaba a la capital y desde ahí se divisaba perfectamente la torre construida por William Kamkwamba.
Un periodista de Daily Times Malaui, Sangwani Mwafulirwa, contactó con el chico para hacerle un reportaje.
Fue un éxito inmediato en todo el país. Sangwani además, contagiado por el “Ripple effect“, se comprometió a pagar con las ventas de la exclusiva, la re-escolarización de William, que inmediatamente ingresó en un internado en Lilongwe, la capital.
Pero la trascendencia y el calado de la historia no había hecho sino comenzar.
Pronto el artículo llegó a la red a través de varios blogs africanos y a los oídos de Emeka Okafor, uno de los más importantes ojeadores del proyecto “Thinkers and doers” de la TED Global. Organización que busca jóvenes talentos al servicio del desarrollo por todo el mundo.
El resultado: un amplio reportaje que ha dado la vuelta al mundo y ha permitido a William llamar la atención sobre los problemas de su comunidad.
William siempre ha consentido, inteligentemente, la explotación de su imagen y su inspiradora historia, a cambio de generar más recursos para su aldea y los suyos.
Son constantes sus viajes a los Estados Unidos para revender su historia con entrevistas y conferencias. Ha abierto un blog (que evidentemente lo escribe un representante bajo su supervisión).
También se encuentra rodando una película documental sobre su vida en Malawi y está escribiendo un libro que publicará en septiembre de este año. Evidentemente hay una gran campaña orquestada en torno a su figura y su historia, y él lo sabe.
Me pareció una propuesta maravillosa, para poder aplicar en muchísimos lugares, donde las necesidades son muchas, y creo que las ganas de hacer también. Se necesita iniciativa y compromiso.
Vamos a ver de a poco hasta donde podemos llegar. Comparto la nota
“Con lo que hay” nace como un taller académico de arquitectura dentro de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Artes (FADA) de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE); una experiencia pre-profesional donde el estudiante pone sus conocimientos académicos al servicio de la sociedad, respondiendo a las necesidades reales de una comunidad específica.
Dentro de sus increíbles proyectos construidos nos encontramos con "La Cabaña de los Tres Faros", una infraestructura que busca mejorar el espacio públicode la comunidad de Puerto Limón, entregando protección frente al sol y la lluvia, y un área de juegos para los niños. Todo esto construido con los materiales y la mano de obra disponible en el lugar, y con un presupuesto total de $0.00.
Descripción por los Arquitectos. La Cabaña de los tres faros
La cabaña de los tres faros es una infraestructura que proporciona sombra y juego, construida junto con la comunidad rural de Rocafuerte, perteneciente a la parroquia de Puerto Limón (Ecuador), durante el primer semestre académico 2013.
¿Con lo que hay?Cero corazón y harta pasión.
El oficio del arquitecto es de servicio. Este servicio y sistema de conceptualización, diseño y construcción debe ser el mismo para todo tipo de usuario y situación. A veces la paga es monetaria y a veces una sonrisa. Con esa visión trabajamos el taller “Con lo que hay”, no bajo una perspectiva de caridad si no de cubrir una necesidad prestando un servicio, en donde las decisiones se las toma a manera de consenso, compartiendo criterios más allá de los egos. Eliminando así una innecesaria arquitectura de autor.
El taller abarca desde temas de diagnóstico, análisis, diseño y construcción arquitectónica participativa, hasta la concepción y publicación de manuales para uso de la población en donde se esté interviniendo.
Uno de los requerimientos académicos es el de necesariamente generar propuestas espaciales durante el taller, es decir, que exista una infraestructura construida, lo cual nos sirve como una herramienta de enfoque para potenciar las fortalezas de los estudiantes.
Como su nombre lo indica, el taller trabaja con los recursos y problemáticas específicas a cada lugar y sociedad de intervención. Los resultados de los talleres dependen de los entornos en los que se intervenga, los espacios, los tiempos y especialmente las comunidades. Nuestros aportes pueden ir desde ayudar a la comunidad a leer sus necesidades reales, o que la comunidad nos haga ver las nuestras, o la posible construcción de una infraestructura.
Una situación en la que todos ganemos es nuestro principal objetivo y para que esto sea posible es necesario que todas las partes aportemos con algo, desde el taller aportamos con una dirección técnica, la contraparte política aporta con la validación legal y la comunidad brinda sus materiales y juntos compartimos la responsabilidad del diseño y la mano de obra de construcción.
Este taller en la actualidad es el único en su clase dentro de la facultad, y puesto que nuestro semestre académico dura apenas 4 meses, ha provocado que se desborde. Por otro lado la oficina de arquitectura en donde colaboro denominada “ensusitio arquitectura” tiene una visión muy similar a “Con lo que Hay”, por esta razón se decide juntar energías y crear una extensión universitaria y profesional de voluntariado. Se toma esta decisión principalmente para poder dar una continuidad necesaria a los proyectos.
Con la comunidad que hay: Puerto Limón
En esta ocasión el taller intervino en la Parroquia rural de Puerto Limón, perteneciente a la provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas, Ecuador. En la comunidad de Rocafuerte trabajamos en colaboración con el Gobierno Local de la Parroquia y FASCA, una ONG que se dedica al desarrollo comunitario del sector.
Puerto Limón se encuentra a seis horas de distancia de la ciudad de Quito, en una zona con clima tropical, siendo muy cálido y húmedo, generando así la necesidad imperante de tenerespacios de sombra y resguardo de la lluvia.
Esta comunidad tiene una población indígena minoritaria pero considerable, que en muchas situaciones funciona como eje y referente cultural. El pueblo Tsáchila posee una profunda tradición cultural y mística religiosa que gira alrededor de sus conocimientos de curación por medios naturales y espirituales a nivel chamánico.
A diferencia de otras ediciones de este taller, esta ocasión la comunidad poseía su “Plan de desarrollo local”, en donde afloraban ya las necesidades más evidentes y debido a esto para nosotros fue más efectivo encontrar nuestro aporte a ese proceso, siendo los denominados “Espacios saludables” una posibilidad real de intervención. Estos espacios dentro del plan de desarrollo son definidos como “espacios de recreación para los sectores vulnerables de la población; niños, mujeres y adultos mayores”.
Con los colaboradores que hay…
Toda la comunidad estuvo presente en distintos niveles de contribución. Desde los procesos de concepción del proyecto, materiales, alimentación y hasta un apoyo técnico empírico vital para poder levantar la estructura.
Los pobladores de Rocafuerte básicamente se dedican a actividades de agricultura y ganadería, siendo la capacidad técnica y constructiva bastante limitada. Sin embargo, su aporte fue que, a partir de una colaboración económica comunitaria, contrataron un “maestro de obra”, habitante local, que nos apoyó con sus valiosos conocimientos. Los vecinos nos proporcionaron los materiales locales, toda la caña guadua y la paja toquilla. Así mismo los pobladores apoyaban con lo que podían durante las jornadas de construcción, y también, claro, la calidez humana de un reconfortante plato de comida a la hora del almuerzo.
La contraparte legal estuvo a cargo de la representación política del sector, el gobierno parroquial de Puerto Limón, que aportó validando el proyecto como un modesto aporte a la cristalización de su plan de desarrollo y también materiales, cemento y hierro, para los cimientos y refuerzo estructural.
Desde la academia además de nuestro equipo de base tuvimos el apoyo del Arq. Javier Badillo quien fue coordinador general en la producción del plan de desarrollo de la parroquia de Puerto Limón, su aporte fue clave para poder entender en profundidad las reales problemáticas locales, además de ayudarnos a establecer y profundizar los necesarios vínculos con los líderes de base comunitarios.
También desde el sector de las ONG, Fundación Acción Social Caritas (FACSA), una organización que ha trabajado en la zona durante mucho tiempo, aportó con sus contactos y vínculos con la comunidad y también económicamente para la realización de la publicación, de la que se comentará posteriormente en este texto, puesto que esta será una herramienta de seguimiento al proyecto en el sector.
Desde las aulas, el proyecto también integró diversos profesionales y especialistas en guadua y trabajo social, que laboran en nuestra facultad, dando así también un valor y soporte técnico a nuestro objeto.
Con los materiales que hay...
El material básico de desarrollo constructivo fue la caña guadua, endémica del sector, que nos sirvió para edificar la estructura para la cabaña, utilizando además refuerzos en los empalmes con cemento y hierro para garantizar una larga duración y resistencia del objeto.
La paja toquilla se utilizó para cubrir los espacios de sombra y estadía. Llantas, cemento y hierro fueron los materiales de cimentación. Siendo este uno de los aportes tecnológicos más significativos del proyecto.
Con los procesos de diseño y construcción que hay…
La visión del taller no es asistencialista y tampoco cree que debe materializar las ideas de la comunidad de manera literal, puesto que por algo estamos estudiando lo que estudiamos y porque muchas veces los usuarios no tenemos claras nuestras necesidades y capacidades, y ahí es en donde entra la visión del profesional a colaborar y complementar el equipo.
De esta manera nace la “Cabaña de los tres faros”, una colaboración participativa en donde entre todos, comunidad y estudiantes, se generaron ideas directrices que desembocaron en el diseño arquitectónico, debatido y desarrollado a partir de un proceso de toma de decisiones basado en consensos.
El diseño parte de la necesidad de tener un espacio incluyente para el porcentaje de la comunidad denominada como “los vulnerables”; niños, mujeres y ancianos, un objeto en donde se pueda estar mientras los jóvenes practican deporte en el parque de intervención. Este espacio entonces debía tener un carácter incluyente que genere tanto espacios para estar con sombra y espacios para jugar con un tamiz de luz, de esta manera se integran las actividades, escalas y los usuarios en una infraestructura que desde lo radial se abre produciendo una invitación y un referente cultural importante en la zona: la rotonda como espacio de reunión.
Entonces la necesidad partía de lograr un ambiente que trabaje tanto la relación con el exterior, de observación y correspondencia, y hacia el interior como el juego, protegido.
Simbólicamente el diseño proviene de una tradición Tsáchila en donde, según lo que los pobladores nos compartieron, existía un chamán, viejo sabio, que se sentaba a la sombra de una gran piedra a estar con los niños del lugar y les contaba sus historias; los niños escuchaban y otros jugaban en la piedra, trepando y cayendo. Esta imagen, de un espacio de sombra multifuncional, guió nuestro camino en el proceso de diseño.
La geometría del módulo básico proviene de este referente pétreo, mineral, que genera sombra, y al multiplicar y ensamblar este módulo logramos un sistema que en la periferia provee accesibilidad, invitación y sombra; yen el interior una zona de juego protegida y con una iluminación tamizada.
La estructura finalmente se compone de seis “módulos piedra”, tres faros y tres juegos, que se fusionan como un monolito estructural cubriendo así las necesidades de estar, sombra, cobijo y juego.
Los procesos se dieron paralelamente desde la universidad y desde la comunidad. Nuestras visitas para diseño participativo y posterior construcción se realizaban cada quince días, con jornadas largas de trabajo, saliendo de Quito a las 4 am y llegando a la comunidad a las 9 am, sin parar hasta las 6pm, hospedándonos en la misma parroquia. El domingo la jornada iba desde las 8 am hasta las 4 pm, regresando a Quito finalmente a las 10 pm. La materialización se logró en seis jornadas de construcción junto con la comunidad, el resto del tiempo se lo invirtió en diagnóstico, diseño participativo y la publicación.
En la universidad se montó una maqueta escala 1:2, que nos sirvió de ensayo estructural para darnos cuenta de los posibles problemas que la edificación tendría y también para escoger los empalmes y sistemas constructivos más adecuados y eficientes.
Con la publicación que hay…
Paralelamente a nuestros procesos de diseño y construcción, preparamos una publicación que nos permitió dejar un sistema para que la comunidad pueda dar seguimiento a los procesos iniciados. Esta publicación, además de cumplir con un necesario fin académico que encaja dentro de la visión social de la PUCE, aporta al desarrollo de las comunidades intervenidas no solo prestando un servicio, sino sembrando nuevas posibilidades.
Esta publicación tiene un formato de manual y registro, tipo diario, enfocado en la comunidad, usando su lenguaje. Sirve para reafirmar sus procesos y brindar información técnica en cuanto a sus problemáticas urbano-arquitectónicas. Así, se profundizan y dejan sembrados proyectos que durante nuestro semestre académico no nos fue posible ejecutar.
- Modelos de intervención y gestión comunitaria, un diario que registra los procesos vividos.
- Tipologías arquitectónicas y sistemas de ocupación espacial rural costeñas, para así entender sus sistemas de apropiación espacial y poder aportar generando matrices como una herramienta de ordenamiento de sus lotes, garantizando una alta productividad agrícola y evitando la contaminación de sus tierras debido a la ubicación de sus pozos sépticos.
- Profundización sobre cultivo, cosecha y uso de los materiales locales, para así revalorizarlos por su nobleza para la construcción, la caña guadua, paja toquilla y caraca.
- Los manuales de construcción para ciertos objetos arquitectónicos de fácil réplica, de sombra y recolección de aguas lluvias, juegos infantiles y un paso a paso de la construcción de “La Cabaña de los Tres Faros”, para su posible reproducción en otros puntos de la comunidad, dado su bajo costo y sencilla tecnología.
Con lo que hubo…
El nombre de la cabaña fue designado por la comunidad, de hecho fue un aporte directo del maestro de obra, don José Delgado, que propuso ese nombre debido a como se veía finalmente el objeto ya construido. Y como en esta imagen, eran como faros que llamaban a un lugar seguro.
Los “vulnerables” y los “no vulnerables” se apropiaron de la Cabaña, incluso antes de terminar su construcción, ahora está en manos de ellos el adecuado mantenimiento de la estructura. Junto al equipo de "Con lo que hay" (voluntarios) tenemos planeado un viaje para dar seguimiento a los procesos.
Por otro lado y para terminar, es muy importante la comunicación a todo nivel en este tipo de proyectos, para así todos los colaboradores remar en la misma dirección.